DEJAR VIVIR.....

                                                                                                 

La convivencia, según Jacques Barzun, es
a la humanidad lo que " el camión para el camionero",
" el bisturí para el médico", "el niño a la madre", o sea
una herramienta y un sentimiento...

                Muchos pueden ofenderse por otorgar una calidad utilitaria al espíritu social; otros quizá crean que no vale la pena comprometer al corazón con el egoísmo ajeno. ¿ Quién tendrá razón? ¿ "Vivir y dejar vivir" puede ser una fórmula que concilie ambos criterios?
                En la ONU, se hacen grandes trabajos, largamente meditados, que llevan meses para escribirse y horas para exponerlos. ¿ Cuáles son sus tesis?" Si no modificamos el rumbo que está tomando la civilización dejaremos de existir como hombres sobre la Tierra"
                Palabras más o menos, también lo afirman pescadores mexicanos, campesinos del Paraguay y hombres de negocios de Nueva York. Razonamientos parecidos surgen de thailandeses y porteños quizá a la misma hora; todo el mundo siente necesidad de asegurar la convivencia humana. Guerras, flagelos naturales o escasez de elementos vitales son noticia diaria.
               Muchos sociólogos afirman que la civilización, al igual que los jóvenes, pasan por momentos de angustia. Vivir en tensión, no compartir con alegría los sentimientos, " ver continuamente oscurecido el panorama de la existencia, ¿es el destino reservado al hombre? Desde ya que no. Fuimos creados para ser FELICES, PARA LOGRAR LA FELICIDAD DE NUESTROS SEMEJANTES! 
                Desvirtuar esta ley no escrita es escribir la ley del rigor propio y de los demás. Será mejor una mezcla de ciencia y fervor religioso para que la civilización cambie para bien, al fin con sus 20 milenios de experiencia son muchos para volver a empezar.