Durante la recuperación
de una enfermedad, los gatos
necesitan paciencia, cariño y
algunos cuidados especiales.
Por eso, además de cumplir
al pie de la letra, los consejos
del veterinario, hay otros
que le vendrán muy bien.
Uno de los aspectos más importantes es que el animal se sienta rodeado por personas en las que confía. Pero el ambiente también cuenta y por eso reserve una caja o un cajón que esté limpio y seco.
Para asegurarle abrigo, forre la cama con papeles de diario, una toalla y coloque, además, una botella de plástico llena de agua caliente. Es muy común que el gato pierda el apetito durante la convalecencia.
Sin embargo, hay que tratar de que coma con cuchara alimentos más bien líquidos y calientes. Si se rechaza la comida o los remedios, sujete la cabeza del gato con una mano pero sin tocar los bigotes y presione ligeramente la mandíbula para que abra la boca.
Con respecto a la higiene, limpie la zona de los ojos con un algodón humedecido en agua tibia. También puede aplicar un poco de vaselina en las zonas doloridas. Recuerde que deberá limpiar diariamente el lugar donde se recupera su mascota.
ANTE CUALQUIER DUDA, CONSULTE CON SU VETERINARIO DE CONFIANZA.
Fuente: Revista Mía, editorial Perfil S.A
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