AYUDAR SIN DESTRUIRNOS

El que cuida a un enfermo,
ya sea terminal o no,
con su dedicación exclusiva
y absorbente, si no lleva a cabo,
una planificación en sus tareas
cotidianas, finalmente terminará
agotado y frustrado,
y no podrá atender bien
al paciente.

                                                                                                    


          Puede ser útil que recordemos algunas pautas que ayudan al cuidador de un enfermo grave, crónico o incurable, a mantener un buen equilibrio físico-emocional, ellas son las siguientes:

1.- DISTRIBUIR EL TIEMPO: Todos los días ( al margen de la labor de asistencia al enfermo), dispongamos de un rato para nosotros mismos y otro para la convivencia familiar o social.

2.- DEDICAR MÁS QUE NUNCA, tiempo y mimos a nuestra pareja e hijos.

3.- EL MUNDO Y LA VIDA, SIGUEN.  Procuremos mantener las relaciones con los amigos, aunque tengamos que espaciarlas. Un llamado telefónico, también sirve para relacionarnos.

4.- PASEAR O HACER EJERCICIOS : Al menos durante media hora al día, distraerse hace bien.

5.- ACUDIR A ESPECTÁCULOS: Cada cierto tiempo es reconfortante ir a un teatro, un cine, a un concierto, o visitar museos.

6.- CONTRATAR UN PROFESIONAL: Cada tanto es bueno buscar a una persona profesional, para que se quede en la noche, con el enfermo. Como también pedirles ayuda a familiares, para que nos reemplacen y así nosotros descansar bien.

7.- NO DESCUIDAR LA ALIMENTACIÓN: Es primordial alimentarse para que nuestro cuerpo no decaiga, y el enfermo no lo note. Cansados o tristes no haremos bien nuestro trabajo. Porque el enfermo además de ayuda, también necesita ayuda, conversación y buenas ondas.

8.- MANTENDREMOS UNA BUENA CONDICIÓN : Tanto física como mental, tenemos que estar, para atender al enfermo. Nuestra vida ha sufrido cambios, pero sigue siendo protagonista de ella: intentar que no trastoquen lo menos posible su trabajo, aficiones, cuidados y relaciones con las personas queridas.

          Muchas personas, dicen " yo puedo con todo", sea cual sea nuestro carácter o el esfuerzo o las horas a invertir, pero el transcurrir del tiempo que nos lleve cuidar un enfermo, merece recordar los consejos ya mencionados.

Fuente: Revista Saber Vivir " Convivir con un enfermo crónico".
             *****************************************************************