los chicos preguntan muchas cosas
que a veces nosotros, los adultos
pensamos en la forma de aclararles
la duda. Pero a continuación
ganadores de premios Nobel,
en una forma simple y genial,
responden así... sin empacho y pudor.
¿ QUÉ ES EL AMOR?
RESPONDE: EL DALAI LAMA, Premio Nobel de la Paz, 1989.
" Tal vez te preguntes si se puede aprender a amar. No hay una receta infalible. Para mí, viene a ser algo así como el arte de la cocina. A veces hay que hervir primero las hortalizas, luego pasarlas por la sartén, y añadir los condimentos al final. Otras veces, la preparación empieza por añadir una buena cantidad de sal. Para que nos salga un plato apetitoso, hay que tener en cuenta muchas cosas distintas. Lo mismo sucede en el trato con las personas. La capacidad para ponerse en el lugar de los demás y considerar lo que uno haría si se hallase en la misma situación es muy útil cuando se quiere aprender a amar. Pero también se requiere un gran acto de valor: el que se necesita para ponerse en el lugar del otro.
A todos nos ha parido una madre y cada uno de nosotros desea ser feliz, no desgraciado. Sean cuales sean el color de su piel o su religión. Cuando me acerco a un ser humano con ese criterio, no me resulta difícil tener la sensación de que esa persona es exactamente igual que yo."
¿ POR QUÉ HAY GUERRAS?
RESPONDE: ARZOBISPO DESMOND TUTU, Premio Nobel de la Paz, 1984.
" El hombre teme al hombre, pero aparte de ese temor fundamental, las guerras comienzan por muchos motivos. A veces resulta que un país muy poderoso quiere tiranizar a otro país más pequeño. Ocurre como en el patio de la escuela, cuando hay un grandulón que quiere mandar sobre los demás. Quizá lo hayas vivido en persona, ¡ con tal que no seas tú el tirano!. En todo caso, el tirano, cuando descubre que otro tiene una cosa que a él le gusta, piensa que es suya o debería serlo. Y si el otro es más débil y no quiere dársela, entonces el tierno recurre a la violencia y se la quita. Al final, la situación siempre acaba en lágrimas, y casi nunca son los tiranos los que lloran en el patio de la escuela. Al contrario, muchas veces los tiranos son los vencedores.
Es lo que pasa cuando un país envidia lo que tiene otro país. Por ejemplo, el petróleo o el oro.
También hay guerras cuando alguien se siente ofendido, por ejemplo, cuando el jefe de Estado de un país cree que los de otro país han atropellado al suyo. Y una guerra incluso puede empezar por un motivo inexistente. Pongamos por ejemplo, que un presidente muy poderoso quiere ocultar un escándalo que podría hacerle perder el poder. Entonces inicia un conflicto con un enemigo que no sea demasiado poderoso, y mientras tanto la gente no se fija en el escándalo. En esa guerra van morir muchas personas, pero el presidente conserva su poder.
Tal vez te preguntes, cómo es que yo, que recibí el Premio Nobel de la Paz, nunca he conseguido impedir ninguna guerra?... Te prometo que seguiré intentándolo."
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Fuente: " Preguntan los chicos y los Premios Nobel, contestan" Libro editorial Paidos.
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