lunes, 14 de enero de 2013

ALGO EN COMÚN

Muchos de nosotros, casi
siempre observamos a los
que nos rodean y casi sin 
querer vemos defectos
que tal vez tengamos iguales
a ellos o peores, pero en
definitiva somos todos iguales,
con defectos y virtudes...

                                                                       

          Cuenta Paulo Coelho, que cierta vez, estaba charlando con un sacerdote católico y un chico musulmán durante un almuerzo. Cada vez que pasaba el camarero con una bandeja, todos se servían, salvo el musulmán, que cumplía el ayuno prescripto en el Corán.
          Cuando terminó la comida y la gente se hubo ido, uno de los convidados no pudo reprimir el siguiente comentario: "¡ Mira que son fanáticos estos musulmanes!¡ Menos mal que no tenéis nada que ver con ellos!".
          " Sí, tenemos - dijo el sacerdote-. El se esfuerza por servir a Dios tanto como lo hago yo.
Simplemente observamos leyes diferentes."
          Y concluyó: " Es una pena que las personas sólo vean las diferencias que las separan. Si mirasen con más amor, verían lo que tienen en común unos y otros, y se resolvería la mitad de los problemas del mundo".

Fuente: Del libro " Once minutos" Paulo Coelho. Editorial Planeta
                         ***********************************************

No hay comentarios:

Publicar un comentario