sin duda, uno de los sabores
más preferidos y deliciosos,
por los argentinos.
Muchos habrán exclamado
alguna vez:¡ Habría que
darle un premio al que inventó
semejante manjar!
Si bien no ha sido comprobado, existe un firme y legendario mito que ha trascendido de boca en boca el cual indica que la exquisita invención se produjo el 17 de junio de 1829. Ese día el general Lavalle se dirigió hasta la estancia de Juan Manuel de Rosas, ubicada en Cañuelas, para deponer sus rivalidades y llegar a un acuerdo.
Comentan que en el lugar se encontraba la mulata desempeñando tareas domésticas quien
estaba calentando leche con azúcar para servirles con el mate a estos personajes históricos.
Ocupada en otras actividades olvidó el lechado (nombre dado a la leche con azúcar) en el fuego, arrojando como resultado una sustancia espesa, amarronada, dulce y con un aroma agradable. De ese modo habría arribado al famoso dulce de leche.
Es importante reiterar que este relato forma parte de la mitología oral y que en varias partes del mundo se atribuyen el preciado descubrimiento, tal es el caso del cocinero de Napoleón de quien se dice habría experimentado una anécdota similar a la nuestra, incluso años antes entre 1804 y 1815.
También cuentan que en el año 1620 ya lo utilizaban para comerlo, en Chile y lo denominaban manjar. En Brasil se dice que ellos lo inventaron. Y en Uruguay aseguran que el dulce de leche es rioplatense.
Qué importa de dónde haya sido creado; a los que gustan de su exquisitez, en distintas preparaciones de repostería o simplemente con pan o tostadas, es para comerlo todo.
Fuente: Historia del dulce de leche. Autor del libro"Historias inesperadas de la historia argentina" Daniel Balmaceda, historiador y recopilador de la historia argentina.
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