de imágenes y sonidos
es una enfermedad que
disminuye la capacidad
de concentración,
especialmente en los niños.
En la actualidad, el consumo abusivo de sonidos y de imágenes proporcionados por la televisión, se ha convertido en una enfermedad cuyo nombre es "telefagia". Este fenómeno tiene una repercusión especialmente negativa en los niños, que bajo su influencia van perdiendo gradualmente la capacidad de concentración.
Las más recientes investigaciones indican que una persona consume un promedio de 1000 horas anuales de televisión frente a 800 horas de escuela, lo que produce un total de 16.000 horas ante la pantalla del televisor durante los primeros 18 años de vida.
Estudios realizados en centros educativos revelan que un número considerable de alumnos manifiestan dificultades crecientes en mantener un pensamiento coherente y continuado. Es que, invadidos por sonidos e imágenes, los niños miran, pero no logran realmente fijar la atención. La telefagia algo tan usual entre nosotros, pero debemos prestarle atención y no ser esclavos de estar mirando tantas horas la televisión, y muy especialmente en los niños.
Fuente: Claudia Wright, para revista Predicciones.
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