son con frecuencia causa del
dolor de espalda.
Fundamentalmente enrollarse
como un ovillo hará que duela
mucho más...
Dormir con su mejor amigo perruno, por más que no tenga pulgas o garrapatas, su saliva como su pelo constituyen un fantástico albergue para todo tipo de alergenos que pueden provocar asma o alergias en una de cada cinco personas. Si es de dormir boca abajo, esta costumbre conduce a la apnea del sueño, es decir a la interrupción del sueño. Para que esto no siga interrumpiendo el descanso, opte por otra postura nocturna.
Dormir con las ventanas abiertas en invierno, hará que se enrosque como un ovillo y esto perjudicará su espalda, además de tener un resfrío o congestión, por lo que es recomendable cerrar la ventana y abrirla en verano. Y si le gustan las flores en la habitación, mejor póngalas en otro lugar, porque pueden ocasionarle irritación si es alérgico. También hay personas que acostumbran dormir con la luz encendida, pero no deja desarrollar un sueño pleno, que es el primero en la noche y es precisamente cuando tiene lugar casi todo el descanso corporal.
Cuando una habitación está recién pintada, no piense dormir en ella, ya que contiene compuestos volátiles que pueden afectar los ojos, por lo menos debe esperar tres semanas para habitarla. Un estudio realizado en el año 1999 por los especialistas de la Universidad de California, indica que dormir mucho es como correr demasiado, hace que la persona se sienta terriblemente agotada durante las 24 horas al día.
Fuente: revista "Saber Vivir"
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