Cuando hace mucho calor
en época de verano, encendemos
el aire acondicionado o los tradicionales
ventiladores y a veces por desconocimiento
la casa no se refresca.
Algunos tips daremos a continuación
para tenerlos en cuenta...
Cuando se utiliza el aire acondicionado, el aire en el exterior de la habitación estará seguramente más caliente y húmedo. Se recomienda cerrar las puertas, para que el aire fresco no se desperdicie en pasillos o habitaciones que no se usan, y cuidar que las ventanas estén bien cerradas para que el aire caliente no entre.
Es importante usar "trucos" que no consumen energía para mantener la sensación de frescura, por ejemplo mantener las habitaciones en penumbras. En efecto, las persianas bajas y en menor medida las cortinas gruesas no dejan pasar el calor del sol y evitan que se caliente la casa, disminuyendo la utilización de los equipos de acondicionamiento del aire.
Aproximadamente hasta las 9, las mañanas son frescas. Es el momento de ventilar las habitaciones, abriendo las ventanas y dejando que entre el aire. Si lo hace más tarde, no sólo se desperdicia el enfriamiento matutino natural si no que se calentará la casa para luego gastar más energía al tener que enfriarla.
El mantenimiento de los equipos aumenta su vida útil y también favorece el ahorro de energía. Se aconseja la correcta limpieza de los filtros de aire periódicamente y la serpentina exterior una vez al año, antes de que comience el calor.
Fuente: Revista Buenas Ideas y Asesoramiento de Trade, líder mundial en climatización de ambientes.
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