limitada en muchos aspectos
físicos, psicológicos, emocionales
y sociales, como bien lo afirma
Victor Frankl, (neurólogo austríaco),
aunque uno quiera, no puede cambiar
sus características genéticas, ni
aumentar su coeficiente intelectual,
más allá de cierto punto, ni tampoco
tiene el poder de terminar con las
crisis económicas o las guerras del mundo...
Sin embargo, hay muchas otras cosas que las personas se dicen constantemente "NO PUEDO HACER" y eso es, en realidad, una forma de no enfrentar la realidad de las cosas, decir por ejemplo: "No puedo titularme", "No puedo bajar de peso", "No puedo dejar a esa persona",etcétera. En estos ejemplos podemos observar como el recurrente NO PUEDO, es una manera que utilizamos las personas para AUTOLIMITARNOS a través de nuestra forma de hablar.
La mayoría de las veces aquellos NO PUEDO que se pronuncian, son en realidad un AUTOENGAÑO, una manera de hablarse a sí mismos o a los otros para no asumir la responsabilidad de las propias elecciones. No es que no se pueda hacer algo, la realidad es que deliberadamente se está eligiendo no hacerlo.
Muchas veces, cuando se dice NO PUEDO HACERLO, la realidad es que NO QUIERE HACERLO. Reconocer las decisiones personales claramente, asumiendo la propia responsabilidad y las consecuencias de nuestras elecciones personales es, sin duda, un acto de madurez emocional.
Fuente: gestaltsinfronteras.com
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