Los trenes bala Shinkansen
de Japón, transportan pasajeros
a las principales ciudades del país,
a más de 300 km por hora.
En las pruebas, los ingenieros
observaron que cuando el tren
entraba a un túnel, hacían
un ruido ensordecedor...
Los ingenieros japoneses no podían resolver el problema que ocasionaba el tren bala al entrar a un túnel a esa velocidad. Las ondas de presión atmosférica, producían un ruido ensordecedor que hacía vibrar las ventanillas a 400 metros de distancia.
Mientras pensaban cómo resolver este problema, el ingeniero Eiji Nakatsu, ávido observador de aves, se preguntó si había algún ser vivo que se enfrentara habitualmente a cambios súbitos en la resistencia del aire, y entonces lo recordó: el martín pescador.
Este pájaro se tira del aire, que es un medio de baja resistencia, al agua, que opone más resistencia, y salpica sólo unas cuantas gotas. Los ingenieros rediseñaron la nariz del tren bala a semejanza del pico del martín pescador, y así redujeron el ruido y el consumo de energía eléctrica.
Fuente: Shaun Pett, revista Selecciones Raider´s Digest
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