más conocida como corona de Cristo o
Espina de Cristo.
Es una planta suculenta de crecimiento
arbustoso originaria de la isla de Madagascar...
Es muy fácil de cultivar y cuyas vistosas flores la convierten en una atractiva pieza ornamental en jardines, terrazas y balcones e incluso en el interior del hogar. Debe su nombre común, a las espinas de sus tallos, algo que dio origen al mito de que esta fue la especie utilizada para armar la corona de espinas llevada por Jesucristo, al momento de su crucifixión.
Alcanza una altura entre 1,5 mts a 2 mts, las flores son pequeñas y poco visibles, aunque las hojas modificadas (brácteas) de colores vivos que se encuentran justo debajo de las flores. La mayoría son de color rojo sangre, aunque existen otras variedades de color amarillo, blanco o rosado. Por lo general están florecidas todo el año, pero si la temperatura es de bajo cero, caerán sus hojas y volverá a florecer en primavera y verano.
Debido a sus espinas ya que poseen un látex venenoso, o tóxico, es recomendable evitar el contacto con la piel y los ojos, y ubicarla en lugares fuera del alcance de los niños o mascotas, pero a su vez, esta savia protege a la planta de las plagas.
Fuente: www.flordeplanta.com.ar
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