La palabra Navidad viene
del latín: Nativitas y significa:
Nacimiento, pues se celebra el
nacimiento de Jesús.
La palabra latina Nativitas viene
del verbo nasci : nactus/nacido=
nativitas/cualidad de nacer.
Cuando Jesús se encuentra con Nicodemo y lo induce a nacer de nuevo, Nicodemo en su confusión le pregunta si acaso era posible que un hombre viejo pueda volver a entrar al vientre de su madre. Jesús entonces hablaba de que necesitaba nacer otra vez en el espíritu.
El poeta y escritor Jorge Luis Borges, por su parte, dijo que algo nuevo como la muerte podía acontecerle a alguien viejo. Se refería a la muerte física como un acontecimiento puro y nuevo para alguien ya entrado en años que no le queda nada por esperar. En este caso, sería el nacimiento para un adulto. Adulto en sus sentidos, pero con la posibilidad de volver a nacer.
Cuando estamos listos para nacer, albergamos en lo profundo la capacidad de ver y entender que así estamos necesitándolo, como Nicodemo, que fue a preguntarle a Jesús el Nazareno de qué modo obtener la salvación. Si esto sucede, si la luz de alerta ya está encendida, debemos actuar a favor de esto.
En nuestro corazón hay una fuerza no sólo motora de vida que nos obliga a respirar y a mantener la sangre en constante movimiento, sino que está también el secreto y la verdad que nos obliga a ser otro cuando nos damos cuenta que nuestro camino no es el correcto, o que simplemente necesitamos más alternativas.
Obedecer a esa voz de cambio, es un acto de prudencia y sabiduría que nos mantendrá sanos por dentro y por fuera.
Fuente: Erika Madrid, Humanista. Revista Salud Alternativa.
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