creencia acerca de que el uso habitual
de los teléfonos móviles podría implicar
severos riesgos para la salud,
por lo que, la Organización Mundial de la Salud,
hizo un informe público clarificador.
Los riesgos que podrían suponer para la salud del ser humano tanto la utilización de los teléfonos móviles como sus estaciones base, constituye una cuestión que la Organización Mundial de la Salud ha tomado muy en serio. Es que al haberse incrementado a pasos agigantados en los últimos años el número de usuarios de la telefonía celular, un pequeño aumento en la incidencia de efectos adversos sobre la salud tendría grandes repercusiones desde el punto de vista de la salud pública.
Como la exposición a los campos de radiofrecuencia emitidos por los teléfonos celulares suele ser más de 1000 veces mayor que la exposición a los emitidos por las estaciones base, las investigaciones se han centrado casi exclusivamente sobre los posibles efectos adversos de la exposición a los teléfonos móviles.
Las áreas que abarcan tales estudios son: cáncer, accidentes de tránsito, interferencia electromagnética y otros efectos sobre la salud, habiéndose logrado hasta la actualidad los siguientes resultados.
Cáncer: según las pruebas científicas existentes, es poco probable que la exposición a campos de radiofrecuencia como los emitidos por los teléfonos celulares y sus estaciones base, produzca cáncer o facilite su desarrollo. Se están llevando a cabo varios estudios para determinar si los resultados de algunas investigaciones realizadas en animales son extrapolables al ser humano. En estudios epidemiológicos recientes no se han encontrado pruebas convincentes de que el uso de los teléfonos celulares incremente el riesgo de cáncer o de cualquier otra enfermedad.
Accidentes de tránsito: Sin embargo, las investigaciones realizadas han demostrado un claro aumento del riesgo de accidentes de tránsito, que es 3 a 4 veces mayor cuando el conductor utiliza teléfonos móviles, aunque tengan dispositivo de manos libres, porque distraen su atención.
Interferencia electromagnética: La utilización de los teléfonos móviles cerca de algunos dispositivos médicos, como los marcapasos, los desfibriladores implantables y algunos audífonos, puede interferir el funcionamiento de estos aparatos. También las señales de los teléfonos móviles pueden causar interferencias en el instrumental electrónico de los aviones.
Otros efectos sobre la salud: Los científicos han puntualizado otros efectos de la utilización de los teléfonos celulares, tales como alteraciones de la actividad cerebral, de los tiempos de reacción y de las características del sueño. No obstante, estos efectos son menores y aparentemente carecen de importancia desde el punto de vista de la salud. Se están realizando más estudios para tratar de confirmar estos hallazgos.
* En tal sentido, ya se han gastado en todo el mundo más de 250 millones de dólares para estudiar los efectos de la radiofrecuencia sobre la salud y se estima que habrá que esperar algunos años más para completar las investigaciones, evaluarlas y poder confirmar el concepto que hoy en día tiene la Organización Mundial de la Salud sobre la ausencia de riesgos para la Salud sobre la ausencia de riesgos para la salud que deriva de la utilización de teléfonos celulares.
Fuente: Informe especial de Revista Cooperativa sobre un documento de la OMS.
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