ALIMENTOS QUE DEBEMOS DISMINUIR PARA NO PADECER ANSIEDAD

Los metales pesados como aluminio,

arsénico, cadmio, plomo y mercurio,

cuando se encuentran en cantidades

que superan las tolerables por el

organismo, inducen a estados de

ansiedad, depresión y confusión

emocional y mental, ya bien

reconocidos...

                                                                                           

              Dichos metales ingresan en el organismo a través del smog, residuos presentes en cañerías, restos de combustibles, utensilios de cocina, tinturas, pinturas, desechos industriales, etcétera. Por otra parte, si faltan minerales esenciales como, calcio, magnesio, hierro, selenio, zinc, el organismo se vuelve incapaz  de eliminar los metales pesados, lo que causa múltiples síntomas, como nerviosismo, hiperactividad, estrés crónico, insomnio, intolerancia a los ruidos, etcétera, según cuál sea el mineral faltante o el metal en exceso.

          Las semillas, incluidas en el desayuno, son un aliado eficaz para ofrecer al organismo todos los minerales que necesita. Y la alimentación naturista, en general, con el agregado especial de algas, el miso y las ciruelas umeboshi, colabora en la eliminación de los metales pesados. El consumo excesivo de conservantes, edulcorantes, saborizantes, etc, constituye otro factor que agrava el cuadro, ya que puede haber una intolerancia intrínseca que provoque un sobreestímulo del sistema nervioso, y nos predisponga a estados de ansiedad.

          Si la alimentación es rica en productos industrializados, por ejemplo: enlatados, caldos o sopas instantáneas, mayonesas, golosinas, fiambres, snacks, gaseosas o jugos artificiales, el organismo puede estar saturado de estos productos químicos. Un reparador periodo de abundancia de jugos de frutas, ensaladas, frutas frescas y verduras en general, le será muy beneficioso. Las bebidas cola, que contienen cafeína y otros estimulantes, como la nuez de cola, alteran el sistema nervioso cuando se ingieren diariamente. Junto con el exceso de azúcares pueden ser causa de hiperactividad mental, déficit de atención, temblores, tics y alteraciones del sueño.

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Fuente: revista "Saber Vivir"*

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