PIES CON PROBLEMAS DE METATARSUS ADDUCTUS

Los niños que caminan con sus
pies hacia adentro, se describen
como niños con pies chuecos o
que tienen intrarrotación...


                                                                                       

          Esta es una condición muy común que puede involucrar uno o ambos pies y ocurre por una variedad de razones. Los bebés nacen algunas veces con sus pies hacia adentro. Esta posición hacia adentro ocurre desde la parte delantera de su pie y se denomina metatarsus adductus. La mayoría de veces se debe: a estar colocado en un espacio reducido dentro del útero de la madre, antes de que nazca el bebé.
          Puede considerarse que es posible que exita un metatarsus adductus si la parte delantera del pie de su bebé en descanso gira hacia adentro. El lado exterior del pie del niño está arqueado como una media luna. Esta condición generalmente es leve y se solucionará antes de que su bebé cumpla su primer año. Algunas veces es más severa o la acompañan las deformidades de otro pie que ocasiona un problema denominado pie equino. Esta condición requiere una consulta con un ortopedista pediatra que determinará el tratamiento adecuado.
          Cuando un niño tiene intrarrotación durante su segundo año de vida, esto probablemente es debido a que la espinilla tiene una deformación hacia adentro (el hueso llamado Tibia). Esta condición se denomina torsión tibial interna. Cuando un niño entre las edades de tres y diez años tiene intrarrotación, probablemente se debe a una deformación del hueso del muslo (el hueso llamado Fémur), una condición denominada Torsión Femoral medial. Ambas condiciones tienden a ser hereditarias. Los estudios muestran que la mayoría de los bebés que tienen metatarsus adductus al principio de la infancia la superarán sin ningún tratamiento necesario.
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Fuente: www.healthychildren.org
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