lunes, 19 de diciembre de 2016

EL ARTE DE HILAR FIBRAS

El arte de hilar fibras para formar
hilo, es tan antiguo que sobrepasa
las fechas históricas.
La hilatura es un acúmulo de
conocimientos y pequeños avances
tecnológicos por parte de millones
de hombres, a través de miles de años...


                                        Resultado de imagen para imagenes de el arte de hilar                                             

          En Europa Central en el fondo de los lagos Constanza y lago Ginebra, se han encontrado algunos manojos de lino limpio, listo para ser convertido en tela. En la primera vez que se encuentra una tela donde este pueblo de la Edad de Piedra, había aprendido a hacerla entretejiendo gruesas fibras de hierba, porque se cree que los hombres primero aprendieron a tejer antes de aprender a hilar, ya que había siempre fibras y hierbas al alcance de las manos y era sencillo tejerlas.
          Más tarde aprenderían a hilar sus hebras para hacer con ellas telas para sus prendas. En la cultura china se desarrolló la seda como fibra y a partir de aquí, pasó a otros países: India, Persia y Grecia donde se consideraría como un artículo de lujo, y también a Roma. La cría de gusanos de seda, llegó a España en el siglo  VIII, en Sicilia y Nápoles, en el siglo XII y en Francia, en el siglo XVII. Según los historiadores, en el antiguo Egipto y en India se usaba el Huso suspendido, que se hacía girar como un trompo en la mano del hilandero, y al dejarse caer estiraba y torcía las fibras.
          El Huso era un palo de madera fino y puntiagudo por ambos extremos. En uno de ellos, tenía una muesca para sujetar el extremo de la hilaza que se enrollaría sobre él y se le hacía dar vueltas y vueltas. En el medio tenía una especie de disco o rueda lo bastante pesado para girar con suavidad y de forma uniforme.


Fuente: cerato.wordpress.com
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