de Dakota del Norte, han sido
capaces de establecer empíricamente
una relación psicológica entre qué
comemos y qué personalidad
desarrollamos al elegir el alimento...
Según un estudio publicado por el Journal of Personality and Social Psychology, los comensales proclives a las comidas dulces suelen tener un carácter agradable y amistoso, son personas compasivas y solidarias.
Existe un vínculo entre los alimentos que consumimos y el comportamiento social. Según el estudio en el que participaron 55 estudiantes universitarios se estableció una relación entre la elección de alimentos y de su predisposición a ayudar a los demás.
Los 55 encuestados probaron alimentos de los 5 sabores fundamentales: dulce, agrio, amargo, salado y picante, y respondieron a una serie de preguntas relacionadas a sus gustos personales. Como parte del experimento se les dio a elegir entre un alimento dulce y otro salado, luego se les pidió que ayudasen a un profesor voluntariamente.
El resultado fue que los estudiantes que comieron alimentos dulces presentaron mayor disposición a ayudar, en comparación con los del otro grupo. Las personas que les gustan los alimentos picantes son las que prefieren las experiencias nuevas, asumir riesgos y disponen de una mentalidad abierta. Las personas más calmadas, optan según esta investigación por los sabores más insípidos.
Fuente: positive,varilux.es
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