La penterafobia es el miedo injusticiado,
extremadamente fuerte, anormal e
irracional del miedo a la suegra...
Esta fobia es una sensación de miedo o temor a la madre de él o ella en la pareja, y suele incrementarse en los períodos donde las parejas visitan a sus padres como en las épocas festivas de navidad, año nuevo o las largas vacaciones de un verano, esto puede tener como consecuencias: un terrible primer encuentro. Puede que este trastorno haya sido generado por una relación previa, donde la suegra marcó un antes y un después en la persona, esto puede ser, por múltiples causas como por ejemplo: violencia doméstica.
Los síntomas de la penterafobia en primer lugar pueden manifestarse un episodio fuerte de sensación de ansiedad que puede venir acompañado de sudoración excesiva, ansiedad, escalofríos y taquicardia por unos segundos, temblor en los miembros inferiores y excesiva sudoración en las manos e incluso se puede manifestar tartamudez al encontrarse frente a la suegra. Rechazo fuerte hacia las suegras.
El tratamiento para la penterafobia, así como el que se aplica para la mayoría de las fobias, consiste en que la persona enfrente el miedo exponiéndose de forma gradual al mismo, es decir, comienza con un estímulo bajo para que de forma progresiva al ir aumentando los estándares de belleza se llegue a un estímulo alto y de esta forma disminuir o erradicar en su totalidad la fobia.
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Fuente: fobias10.com
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