unos tallos largos que le permiten
trepar por pérgolas, paredes, vallas,
muros, arcos, columnas, celosías o
porches, dejando un hermoso colorido
en el lugar que estén ubicadas...
Hay tres variedades de rosales trepadores: reflorecientes y con las flores grandes; Reflorecientes y con las flores pequeñas en ramilletes; y las no reflorecientes, estos dan una sola floración en el año y es en la primavera, pero cuando florece se llena todo el lugar de rosas con pequeños ramilletes.
En climas calurosos y secos prosperan y florecen tanto que tienden a tener una vida más corta, sobre todo si no se les permite un descanso en verano, o sea, podarla en esa estación. Si se les priva de agua, entrarán en estado de reposo y perderán las hojas en verano, pero florecerán de nuevo en otoño. El método más común para la propagación del rosal, es el injerto de yema en T sobre patrones vigorosos. A veces se practica la reproducción por estacas de madera suave o de madera dura. Otros métodos que se usa son injerto de púa, acodado o por hijuelos.
Fuente: fichas.infojardin.com
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