francés Joseph Ignace Guillotin,
diputado en la Asamblea Nacional,
que la recomendó para su uso en
las ejecuciones en sustitución de
los métodos tradicionales, la
máquina guillotina...
Sin embargo, no fue su inventor, puesto que máquinas parecidas ya se habían utilizado en Bohemia durante el siglo XIII.- Alemania, llamada Fallbeil; Escocia, la Maiden de Edimburgo; Inglaterra, el Gibbet de Halifax y los Estados Pontificios desde el siglo XV.- En Italia se la conocía con el nombre Mannaia, según la descripción publicada en 1732, en los viajes a España e Italia, del padre jesuita Jean Baptiste Labat, y en Voyageur francais, del abate Joseph Delaporte, publicado en 1777.
Para evitarle al condenado, sufrimientos inútiles, Guillotín propuso a la Asamblea en octubre de 1789, la adopción de la máquina, pero no fue escuchado. Inspiró y pidió al secretario de la Academia de Cirugía, el doctor Antoine Louis, que diseñara una máquina basada en las ya existentes en otros países europeos. La fabricación fue encargada al fabricante de clavicordios el alemán Tobías Schmidt, asesorada por su amigo el verdugo de París Charles - Henry Sanson.
En abril de 1792, fue ensayada primero con ovejas y luego con cadáveres en el Hospital de Bicêtre, en París. La Asamblea Nacional adoptó el uso de la guillotina a fin de que la pena de muerte fuera igual para todos, sin distinción de rangos ni clase social. En efecto, hasta entonces solo los miembros de la aristocracia tenían el privilegio de ser ajusticiados sin agonía: eran decapitados con una espada a un hacha. En un principio, Marat había apodado la máquina Louison o Louisette. Se estima que unas 1119 personas fueron decapitados en la Plaza de la Concordia durante la Revolución Francesa.
Fuente: es.wikipedia.org*
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