LA CERVEZA NEGRA Y SUS MÚLTIPLES PROPIEDADES PARA LA SALUD

La cerveza negra es una bebida que
se caracteriza por ser de fermentación
baja.
Su origen se localiza en las zonas de
Sajonia y Turinga en Alemania.
Llama la atención por su sabor algo
más fuerte y consistente y por tener
un color oscuro que la diferencia de
la tradicional cerveza rubia...



                                                                                      

          Si bien ahora hay una marca de referencia en el mundo de las cervezas negras que es la irlandesa y gana a la partida a otras del mismo tipo, por su fórmula. La cerveza en general tiene propiedades saludables, y la cerveza negra, además posee mayor cantidad de hierro. La cerveza negra tiene más nutrientes que la cerveza rubia, es decir aporta más vitaminas y minerales como potasio, magnesio y especialmente hierro siendo buena para las personas que necesitan un aporte extra de energía.
          Si bien se establece que aporta mayor cantidad de calorías que la cerveza rubia. Siempre con un consumo moderado, la cerveza es buena para frenar el envejecimiento celular, y así ayuda a eliminar toxinas al poseer propiedades diuréticas. Gracias a que tiene antioxidantes y frena el envejecimiento natural, regenera la piel y la deja mucho más suave y brillante. Y previene del riesgo de padecer    enfermedades cardiovasculares.
          A consecuencia de lo anterior y gracias a que contiene piridoxina o vitamina B6, niacina, ácido fólico y tiamina o vitamina B1, ayuda a reducir el colesterol malo, siempre que la bebamos en su justa medida. Muchas veces cuando se toma cerveza negra, se siente algo saciado y alimentados, dadas sus vitaminas y minerales que aportan la energía que se necesita, como también las proteínas y calorías, pero no sustituye en ningún caso, la comida diaria.
          Con la cantidad de hierro que tiene y los flavonoides antioxidantes, aumenta la actividad de las células de los huesos, disminuye los procesos de anemia y además  evita la pérdida de masa ósea que suele darse durante la etapa de la menopausia. Según un estudio realizado en Finlandia, concluyó que tomar cerveza reducida en un 40% el riesgo de padecer piedras en los riñones. 
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Fuente: okdiario.com
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